La noche es cálida, tormentosa, el pronóstico del tiempo para mañana, poco favorable. La luna llena baña con su luz las paredes de la habitación y, a través de la ventana abierta, el cielo sobre el Hautacam se ve iluminado, casi blanco. Me cuesta dormir estas pocas horas antes de levantarme, desde casa de Josu tendremos que conducir casi una hora antes de comenzar la larga jornada: mañana habrá que madrugar.
Hacer los siete picos del circo de Gavarnie desde el coll de Tentes lleva su tiempo. Finalmente fueron once horas y media de caminata, de algún destrepe incómodo por despiste y de incertidumbre ante la niebla amenazante en algunos momentos, hasta que llegamos de nuevo al coche con los pies doloridos, cansados pero satisfechos.
A veces la montaña nos hace estas concesiones y la lluvia anunciada llegó a una hora del coche, con la gallina ya en el puchero, mientras brindábamos con nuestras cocacolas junto al refugio de Sarradets.
- Torre, Espalda, Picos de la Cascada y Marboré
oso oso polita Rafa, vaya día, de esos que merecen la pena los esfuerzos realizados! y la cenita que me pegué esa noche…