Esta nueva edición de la Marxa Beret había salido airosa de la incertidumbre en torno a su celebración, debido a las condiciones meteorológicas, y de todo el mal rollo que estas situaciones generan. Pasó como en el fútbol, los buenos resultados acallan siempre las voces críticas y las más encendidas discusiones técnicas entre el público. El tiempo, que despejó en el momento oportuno, casi como si fuera consciente de la hora de la cita, permitió una edición con unas condiciones que solo pueden calificarse como espectaculares.
Sin embargo, tras la carrera la organización se encargó, con una medida inadmisible, de ensuciar con una mancha indeleble, salvo rectificación (y aun así, ahí quedará el incidente), la reputación de esta prueba al privar de recompensa económica a las mujeres ganadoras de la prueba larga (la única que recibe premios en metálico, como no puede ser de otra manera para ambas categorías hasta ayer y solo para la masculina ayer), estableciendo un agravio comparativo éticamente inaceptable.
Son muchas las críticas que se escuchan en conversaciones de la gente del mundillo del esquí de fondo en torno a una prueba como ésta. Creo que ningún organizador está libre de sufrirlas, al contrario, pienso que tienen su lado positivo, “ladran Sancho, luego cabalgamos”, sobre todo porque se puede aprender y mejorar sabiendo escuchar los argumentos que sostienen. Hasta ayer, me he hartado de defender esta carrera como participante, como esquiador popular que soy, porque para mí es la cita más importante de la temporada desde hace mucho, compartida desde hace pocos años con la carrera que mi club organiza el domingo siguiente, también de carácter popular. Le tengo cariño a esta prueba y si veis que mi nombre no figura en la lista de inscritos, estad seguros de que me he hecho ya muy mayor o que ese invierno algo me ha pasado.
Aunque comprendo muchas de esas críticas y comparto algunas de ellas, trato de quitarles importancia. Me parecen aspectos menores cuando en nuestro deporte mucho de lo que se hace, se hace desde el voluntarismo, tratando muchas veces de salvar las zancadillas que desde el olvido institucional o los intereses particulares se ponen una y otra vez. Por mucho que soñemos con un deporte del esquí de fondo de Champions, que la televisión nos ha acercado hasta nuestras casas, esos sueños no deben distorsionar nuestra percepción de la realidad, que es tristemente, la que es, más allá del ponme aquí una valla o písame allí una huella.
Pero ayer se transgredió en el Plan de Beret una norma básica, una frontera, que afecta no solo al deporte en general o al femenino en particular, se transgredió una norma social y un derecho individual cuya consecución ha costado mucho esfuerzo, si es que realmente se ha conseguido (hechos como el de ayer demuestran que, obviamente, no es el caso).
Éste no es un problema anecdótico o puntual, de hecho existen leyes y propuestas institucionales que intentan paliar el problema de la discriminación sexista. La finalidad de cualquier evento deportivo de esta índole va mucho más allá que montar un espectáculo, sirve para alimentar y llenar de contenido un deporte, cumpliendo por tanto una tarea social, es por esa condición por lo que acontecimientos de este tipo deben ser subvencionados por las instituciones. Más allá de la anécdota de quiénes sean los vencedores ese día, el deporte tiene siempre un sentido trascendente que abarca diversos aspectos y que es lo que le da su verdadero valor.
La decisión de privar a la categoría femenina de premios económicos, equiparables a la masculina, es un disparate inadmisible y una falta de respeto total a todos y todas las participantes, conculca los principios elementales de la igualdad de género y los principios éticos que deberían guiar a los organizadores de un acontecimiento así. Además, en la medida en que la Marxa Beret reciba el apoyo económico de alguna institución pública (no sé si es el caso) sería probablemente ilegal, o debería serlo.
En lo personal, os aseguro que no volveré a participar nunca más en un acontecimiento de este tipo si no lo hago en las mismas condiciones, con las mismas responsabilidades y exactamente los mismos derechos que mis compañeras deportistas. No volveré a la Marxa Beret si no corrige esta afrenta. Quiero entender que lo que ha ocurrido este año es una desafortunada decisión de un organizador, que delata la mentalidad machista y trasnochada que tiene respecto al deporte, perpetuar esta situación sería un desprestigio para la prueba más popular del esquí de fondo en España.
Creo que la organización está todavía a tiempo de rectificar su error y debe hacerlo, buscando esos euros donde haga falta y la forma de disculparse. Creo que cualquiera puede entender, en la coyuntura actual, que se recorten las asignaciones económicas, ahora bien, ese recorte debe realizarse sin conculcar derechos fundamentales, si hay poco, hay poco para todos, incluso si se eliminan los premios en metálico, se eliminan. Lo que no se puede hacer es castigar al colectivo más desfavorecido, el que precisamente debería estar más apoyado. Este año han corrido la Marxa Beret 12 mujeres frente a 109 hombres en la exigente distancia de 42km, esa desigualdad debe ser combatida desde todos los frentes, con todos los recursos. Parece que quien propone este tipo de medidas, debe entender que hay un deporte de primera y uno de segunda y no es así, hay un deporte de mujeres y un deporte de hombres (por razones fisiológicas, en muchas disciplinas), aunque corramos en la misma carrera.
Aupa, Rafa! Gauza gutxi gehitu dezaket Marxa Bereten emakumezko eskiatzaileen aurka egin denaren inguruan idatzi duzunari. BARBARITATE hutsa da, eta kitto! Soilk gauza bat proposatzea ausartuko nintzateke. Ez banago oker Rojo anaiak izan ziren lehenak, eta, ederra litzateke nire ustez, anaia horiek jaso duten dirua antolatzaileei itzulzea. Betiere, antolatzaile horiek hartutako erabaki mingarri hori salatzeko. Besterik ez.
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Endavant Rafa!
como siempre muy acertado! equànime i certero.
Felicidades por la actitud i me solidarizo en el fondo de la qüestion.
Saludos
Organizazioan dabillen jentea ezaguna det eta zure artikuluaren linka bidaltzeaz gain, baita skiblogekoa ere, eta onek gainera zurearen erreferentzia egiten du, komentatu diet zerbait egin behar luketela…, ea berandu bada ere «espabilatzen» diran!!!
AGRADECEMOS VUESTRA PARTICIPACION
Agradeceros a todos los participantes vuestra paciencia con estos dos últimos años tan difíciles para la Marxa Beret, podemos aseguraros que hicimos lo posible para que pudierais tomar la salida, las condiciones climatologías fueron muy malas, la intensa nevada y el fuerte viento hicieron muy difícil mantener abierto la totalidad del circuito a pesar de tener dos maquinas trabajando toda la noche. Somos conscientes de que esta situación genero deficiencias en la organización, nos preocupa enormemente que después del esfuerzo que hacéis viniendo a Aran y sobre todo subiendo a Beret en las difíciles condiciones de la carretera, no podamos atenderos como os merecéis, pero nos vimos ante la difícil elección de suspender la prueba o ofrecer lo que en un tiempo de dos horas podíamos preparar.
Os merecéis una esplicacion de lo que os ha podido afectar, en primer lugar deciros que el motivo de acortar los recorridos fue primero por cuestiones de seguridad, para evitar el transito de una zona muy expuesta a los aludes en la bajada a Montgarri, y en segundo lugar la imposibilidad de compactar en condiciones el circuito de la zona del Orri, esta mas expuesta al viento y es donde se acumulo mayor espesor de esa nieve nueva.
Lamentamos algunos errores en el reparto de premios, como el aplazamiento de los premios locales o la no inclusión de los premios en metálico para la clasificación de mujeres en el reglamento, respecto esto hemos de decir que la marcha ha mantenido siempre el máximo respeto por todos los participantes sean hombres y mujeres, si por un lado existió ese error por otro, en esta edición es la primera en la que se igualo el premio en metálico del primer hombre y la primera mujer en el sprint. La marcha nunca ha desmerecido el esfuerzo de los corredores y corredoras, tanto es así que en la edición de la temporada pasada se dio por equivocación el importe del primer premio a la segunda clasificada, premio que luego se le volvió a pagar a la primera sin reclamare a ella la diferencia, este mismo año también se pago un premio que por problemas en la clasificación de la anterior edición no se le había hecho efectivo, en este caso tampoco se reclamo el premio a la cuarta clasificada, todo esto porque consideramos que el esfuerzo de todos los participantes merece mucho mas que eso. En el caso de este año se les dijo en Beret a las participantes que se les enviaría el premio en metálico, porque había sido un error al preparar el dinero, ya que el reglamento sí reflejaba la cantidad que había que pagarles
Haremos lo posible por corregir los errores porque nuestro sentimiento es de máximo agradecimiento hacia vosotros, sabemos que sois verdaderos protagonistas de la marcha. Desde esta organización seguiremos trabajando para ofreceros lo que os merecéis, a los que son mas comprensivos con nosotros y a los que son mas exigentes, por que todos somos la Marxa Beret.
Direccion MarxaBeret
Recibo con alivio vuestra disculpa y rectificación por el incidente de los premios en categoría femenina. Creo, como comenté ayer, que el resto de posibles deficiencias son menores y ningún organizador está libre de cometer errores, tratar de corregir y mejorar es la tarea. Espero que la carrera más veterana y popular del calendario del esquí de fondo siga funcionando y gozando de buena salud por muchos años y seguir participando mientras el cuerpo aguante. ¡Saludos y hasta el año que viene!