La  primera vez que vi este efecto en un documental de montaña me impactó. Hay cosas que la experiencia nos enseña que son mudables, la flor que era un capullo hace unos días, luce hoy sus pétalos en una explosión de color, sin embargo, no vemos ese movimiento: lo deducimos.

Ver esos movimientos acelerados nos descubre una realidad fascinante, convirtiendo lo hipotético, lo imaginado, en real. El mar de nubes deja de ser una metáfora cuando descubrimos sus olas y sus mareas.

El Timelapse no es una técnica de vídeo, es en realidad una sucesión de fotografías pasadas a ritmo de película, 25 fotogramas por segundo o más. El acceso a la información en Internet me permitió descubrir que, lejos de ser una técnica sofisticada y al alcance de un equipamiento profesional y caro, todo lo que se necesita para hacer un Timelapse es un trípode pesado y un intervalómetro. Es más, la pequeña cámara de nuestro teléfono móvil, con ayuda de las aplicaciones adecuadas, puede servir a la perfección con una calidad más que aceptable. Podemos programar los intervalos de disparo y generar vídeo a partir de las imágenes obtenidas utilizando exclusivamente el móvil, como he hecho en “Paisajes deshilachados”.

A finales de julio, aprovechando unos días de vacaciones en el valle del Aragón, me propuse fotografiar mi primer Timelapse. Conozco bien el terreno y hay una serie de lugares que me gustan por sus vistas. Madrugué para captar algún amanecer colorido o para aprovechar los bancos de niebla de primeras horas. Podéis ver el resultado. Está todo fotografiado con el móvil, incluso hice una versión con un programa de edición también para móvil, en la piscina de Villanúa. Esta versión la preparé en el ordenador grande, con un programa profesional de edición con más recursos y mejor calidad, aunque la del móvil no está nada mal. Tuve que descartar varias tomas fallidas debido al viento pero, pese a ser un novato, aproveché la mayor parte del material.

Ya sé que ahora está de moda y, si miramos en la red, podemos ver que hay una invasión de secuencias grabadas con esta técnica, algunas muy impactantes, pero yo quería tener la mía.